El plan operativo despliega los objetivos y acciones estratégicas contenidos en el plan estratégico.
En el proceso de planeamiento estratégico el énfasis es puesto en la necesidad de establecer las capacidades clave necesarias para el logro de resultados, lo cual exige brindar una atención especial a la situación de las distintas unidades orgánicas y la evaluación objetiva del desempeño organizacional.
De esta manera, las decisiones estratégicas se sustentan en las capacidades esenciales de la organización, al tiempo que se busca ajustarlas a los requerimientos que surgen de los cambios en el entorno. Esta forma pensamiento subraya que lo más importante de la estrategia son las capacidades internas, pues, debido a la turbulencia del ambiente externo y su cambio constante, resulta muy difícil tomar al entorno como base de la estrategia de la organización.
Desde la perspectiva de las capacidades, los directivos de una entidad son conscientes que si la organización no cuenta con recursos suficientes (personas, know-how, activos tangibles e intangibles, financiamiento, prestigio, alianzas, etc.) para cumplir su misión, ésta no se cumplirá y, a la larga, no se podrán lograr los objetivos estratégicos, poniendo en riesgo su contribución al desarrollo nacional.